Te voy a querer hasta que dos más dos, sean cinco, hasta que llorando, ría, hasta que pueda estornudar sin cerrar los ojos, hasta que Tom se coma a Jerry, hasta que pueda ponerme un calcetín sin quitarme la zapatilla, hasta que se le acaben las vacaciones a Phineas y Ferb, hasta que Doraimon deje de sacar cosas de su bolsillo mágico. Hasta que la luz del Sol, se apague.