Te quiero así, a silencios bajos y latidos fuertes.
Te espero. Siempre te espero. Vos seguís con tu vida, y yo sigo esperándote. Y venís, es cierto, a veces venís. Porque vos podes venir cuando queres, yo, en cambio, sólo puedo estar para cuando vos vengas.
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio